miércoles, junio 28, 2006

La voz y la escritura



Queridos amigos,
tengo el gusto de invitaros a la presentación de la antología de poesía La voz y la escritura publicado por SIAL ediciones y en el que tengo el honor de estar incluida.

Presentación de la antología La voz y la escritura 2006. 80 nuevas propuestas poéticas, auspiciada por la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid y el Ateneo de Madrid, publicada por Sial Ediciones, en el Salón de Actos del Ateneo (Calle del Prado, 21, 28014 Madrid. Teléfono: 91 429 74 42).
Intervendrán en el acto:
Antonio González Terol, Director General de Juventud de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid,
Miguel Losada, escritor y coordinador de "Los Viernes de la Cacharrería",
Luis Eduardo Aute, cantautor y poeta, y
Basilio Rodríguez Cañada, editor y presidente del PEN Club de España.
A continuación tendrá lugar un encuentro con los siguientes poetas: Elena Medel, María Eloy, Yolanda Castaño, Pablo Méndez, Gonzalo Escarpa, Carmen Jodra y Annelisa Addolorato.
Nos acompañarán también muchos de los ochenta poetas antologados.

miércoles, junio 14, 2006

Semana de reencuentros


A veces ocurre que en una semana te encuentras a viejos amigos que por alguna circunstancia no has visto en mucho tiempo. Es como si hubiéramos coincidido en el mismo atasco al regreso de un puente festivo. Así me ocurrió que por fin pude encontrarme con mi viejo amigo Pez Iglesias que me hizo una entrevista por la radio y nos pudimos poner al día de camino a casa. Me alegró ver que seguía con ese entusiasmo tan gratificante que no todo el mundo siente por el trabajo. Y me hizo reflexionar sobre mi futuro laboral. Una vaca que ha llegado casi al ecuador de su vida no debería seguir pastando en los mismos campos de la desidia. Volar no necesarimente implica un viaje. Yo vuelo desde mi silla. Pero la cordura no es suficiente. ¿Qué más me tiene que ocurrir para que me decida? Pez Ale sigue empeñada en que regrese a la lingüística, incluso utiliza mis poemas en sus clases de Literatura Hispanoamericana. Pez Ale también es poeta pero aún no lo sabe; yo creo en ella y alguna vez veréis su nombre impreso en un poemario escrito desde la inteligencia. En la Feria del libro también me encontré con más amigos. Pez Pura, Pez Marga y Pez Gema con su pequeña Pez L a la que dediqué mi primer libro para que lo lea dentro de 10 años. Y a los pocos días seguí encontrándome a más viejas amigas. Pez Marina apareció en el Pabellón de La Feria del libro donde la vaca que escribe daba una conferencia sobre Literatura y mujer y me sentí aún más arropada. Hay quien dice (según Pez Love fue Kundera) que hay dos tipos de poetas: el poeta que vive una vida normal y corriente pero sólo a través de sus palabras vive una vida poética y después el poeta que vive una vida poética pero escribe una poesía mediocre, sin lírica. Conociendo a Pez Marina se podría pensar que vive poéticamente, y conociendo su poética también. Pez Marina abarca las dos versiones de Kundera y eso lo podemos constatar los que tenemos la posibilidad de asistir a su Disección poética en público. Y para disecciones las mías. Cada vez que me alejo de una persona en el espacio me siento diseccionada. A veces me falta un brazo (aún no he recuperado el que dejé a mi buen amigo Pez Tabarca), otras, la risa que siempre se hace la remolona para regresar de Berlín y prefiere quedarse con mi Gaviota. Y ahora, que sé que es verdad que mis amigas Pez voz y Pez palabra se van a vivir a Menorca, siento que me falta un no sé qué. El caso es que nos hemos visto muy poco este último año y sin embargo, sabía que estaban cerca. Quizás la distancia nos obligue a vernos más a menudo. No sé, siempre hay excusas y si no, nos las inventamos, así como el otro día me inventé que quería ver un partido del mundial en casa de Pez Shu y así pude pasar un rato con ella. Pez Shu es tremenda; después de llevar más de 24 horas sin dormir, nos preparó una cena a Pez Nemo, Pez Love y yo con un amor envidiable. Pez Shu se tiene ganado el cielo de los políglotas; además de volar lo involable, le quedan alas y lengua para estudiar italiano, francés y portugués y aprobar con nota. No sigo hablando de Pez Shu, que me frustro. Mis alas están mojadas y mi lengua es de trapo de tanto hablar. A veces es mejor permanecer una temporada en silencio y dejar que se regeneren las metáforas. Como decía el proverbio árabe "No digas nada si lo que vayas a decir no es más bello que el silencio". Ya me callo.

miércoles, junio 07, 2006

Mesa redonda en la Feria del Libro

El sábado 10 de marzo a las 13.00 participaré en una mesa redonda en la Feria del libro cuyo tema es Mujer y Literatura. La entrada es libre.

FERIA DEL LIBRO DE MADRID 2006
Parque de El Retiro
Paseo de Coches
Pabellón de Encuentros

Sial Ediciones
Tritoma
Chandra Ediciones
Centro PEN Club de España
UGT-Madrid

tienen el placer de invitarle a la mesa redonda sobre

Mujer y Literatura

que tendrá lugar el sa´bado 10 de junio de 2006 a las 13.00

Participantes:
1. José Ricardo Martínez Castro, Secretario General de UGT-Madrid
2. Monserrat Cano, narradora, poeta y responsable de Comisión de Escritoras del
Centro PEN de España
3. Dolores Campos-Herrero, narradora, poeta y periodista
4. Beatriz Russo, poeta y narradora
5. José Luis Manzanares, Director Gerente de Tritoma

Moderador: Basilio Rodríguez Cañada, editor y presidente del Centro PEN de España

martes, junio 06, 2006

Entrevista en RNE

Para los que queráis escuchar a una vaca hablar de su novela premiada La versión de Eva Blondie, el próximo jueves 8 sobre las 12 pm, Julio César Iglesias le hará una entrevista en su programa Buenos días.

jueves, junio 01, 2006

Una de cal y otra de arena


Ser una vaca que vuela tiene sus pros y sus contras. Los pros ya los conocemos todos, especialmente los terrestres que miran al cielo y se imaginan a la vaca que vuela yendo de un lugar a otro, visitando las capitales europeas y nacionales con ese glamour que sólo ven los que no pueden volar. Los contras son demasiados, pero a veces, los que volamos nos consolamos como podemos. Sin embargo, a veces ese consuelo no es suficiente, máxime si se trabaja en un entorno en el que te castigan si no vas a cenar con el obispo de la la capilla volante. En Airvatican puede pasar cualquier cosa. Pues nos ocurrió a las pobres monjitas aéreas que durante los tres días que duró nuestra peregrinación decidimos hacer un retiro espiritual nocturno a nuestras celdas de castigo y el obispo se ofendió por no compartir mesa con él. Al día siguiente nos echó un sermón penitenciario y nos hizo un exámen oral sobre seguridad aérea y como aprobamos le dio rabia y nos recriminó que hubiéramos ido voluntariamente a la celda de castigo y le hubiéramos dejado solo en la cena con el otro sacerdote. El caso es que ahora resulta que el trabajo no acaba en el aterrizaje. Eso no lo sabíamos. Después viene la cena (ojalá fuera la última) y la bendición de la mesa con convenios y demás sermones laborales (de qué nos va a hablar este obispo). En fin, que mi madre superiora está muy disgustada con lo ocurrido y ha decidido recurrir al sindicato de la curia aérea. Veremos a ver qué pasa.
Menos mal que me acompaña en estos días Joseph Brodsky y su Marca de Agua. Apuntes venecianos para servirme de consuelo, gracias a mi amigo Pez Jimmy, que es un obispo bueno y muy culto a quien sí acompañaría en todas las cenas. Quizás alguna vez la vaca que escribe naciera en Venecia. Creo que fue no hace mucho. Lo recordé hace 6 años, cuando visité por primera vez Piazza San Marco. Fue un encuentro inesperado. Había vivido durante 6 años en Italia y nunca quise visitar Venecia. Mi amiga Pez Milena me convenció de que le hiciera una visita. Ella vive allí. Pasó un rato hasta que me di cuenta de que estaba en Venecia, teníamos tantas cosas que contarnos que apenas me fijé por dónde caminaba, hasta que me di de bruces con la Piazza. Fue un amor a primera vista, un flechazo perturbador y rompí a llorar. Allí me teníais; enfrente de la Catedral llorando sin parar, llenando la Piazza de agua, agua que desembocó después en el Gran Canal. El síndrome de Stendhal me dejaba inmóvil frente a la belleza, paralizada como un obelisco.
Ya lo dice Brodsky "El ojo adquiere en esta ciudad una autonomía similar a la de la lágrima. La única diferencia es que no se separa del cuerpo, sino que lo subordina totalmente".
Creo que ese día volví a nacer, como tantas veces renazco frente a lo bello, dejando atrás algo de la fealdad inevitable que nos da la vida veloz y desordenada. De nuevo Brodsky "ningún egoísta puede brillar durante mucho tiempo en esta porcelana junto al agua cristalina, porque le roba el espectáculo" La fealdad siempre estará al servicio de la belleza, como el reverso de cartón barato de un cuadro que sólo se ve cuando se descuelga de la pared. Ante una obra bella, ¿quién necesita darle la vuelta al cuadro si no es para cambiarle el marco?